¿Cómo ser un turista de la vida?

Hoy después de desinstalar todas las aplicaciones de redes sociales de mi celular tomé esta importante decisión: “Seré una turista de la vida”.

Sí, alguien me rompió el corazón, la misma persona por sexta vez, y me da vergüenza admitirlo, pero le agradezco porque de no haber sido por esa persona tal vez no me hubiera visto obligada a ver la vida, el mundo y mi mundo de otra manera.

¿Y qué se hace para ser un turista de la vida?

Pues yo empezaré por vivir cada día conociendo, agradeciendo, y sorprendiéndome de todo, y es que todo esto es una cuestión de actitud y decisión.

Veré la vida como si todo fuera nuevo, como si no supiera nada y empezaré desde cero, en los lugares por los que pase, con las personas que frecuente, y con mis hábitos.

Algo dentro de mí me dice que la manera de vivir mejor es ir por la vida como un turista que llega a un lugar y quiere conocer todo, aprender de la cultura y costumbres, ver el paisaje, comer lo que se consume en ese sitio, respirar como si en ese ambiente el aire fuera diferente, y mirar con ojos destellantes todo lo que encuentra a su paso, ver cada hora como una aventura, y tener un objetivo cada día.

Hace poco me mudé de ciudad y llevo ya seis meses en el nuevo distrito al que llegué, mas todo este tiempo la pasé encerrada, deprimida, y sin ganas de nada, pero eso terminó, la vida no se me puede ir de las manos de esa manera.

Hoy es un nuevo día, una nueva actitud y una nueva decisión.

Bienvenidos todos a la oportunidad que tienen para crear su propio “Club de turistas de la vida”.